¿Cómo se cura el Trastorno Bipolar? Mi experiencia con la meditación mindfulness

A los 23 años de edad tuve la experiencia más horrible que jamás he tenido en la vida: un episodio maníaco. Después de 7 días de tener delirios de grandiosidad, desnudarme en la calle y creer que me iba a hacer millonario en 10 días mis papás me terminaron llevando de urgencia al hospital psiquiátrico y unos días después me diagnosticaron la enfermedad “Trastorno Bipolar Tipo I“.

Con el tiempo entendí que no era una enfermedad cualquiera, era una enfermedad grave: cada vez que tuviera un episodio de manía o depresión podría tener daño neurológico y cada vez sería más probable que recayera. Cuando entendí esto me tomé muy en serio la idea de comprometerme con mi salud mental.

Tres años después tomé un curso de meditación mindfulness en línea que me cambió la vida por completo. Las personas con Trastorno Bipolar somos altamente sensibles, y lo que encontré en el mindfulness fue un espacio para descansar de mi reactividad mental-emocional, aprendí a descansar de tanta estimulación cotidiana para al fin encontrar paz interior. La quietud y el silencio habían llegado a mi vida.

Practicar mindfulness ha sido un gran reto para mí porque la práctica misma implica aprender a vivir en el momento presente. Desde el primer día noté cómo mi mente siempre pensaba obsesivamente en el futuro.

Después de estar practicando por al menos 30 minutos diarios de mindfulness durante 4 años noté cómo las recaídas se fueron haciendo cada vez menos intensas hasta el punto en que desaparecieron totalmente. Hoy en día puedo decir que vivo en un estado de eutimia constante. No es que haya dejado de sentir emociones, más bien ahora siento de forma equilibrada, no me voy ni tan arriba ni tan abajo, ni tan triste, ni tan eufórico. Mis emociones ya no me consumen como antes y sin embargo las sigo viviendo y disfrutando.

Quiero comentarte que no he dejado mis medicamentos ni pretendo dejar de hacerlo. Tomo litio (1,350 mg) y olanzapina (2.5 mg) todos los días. Aunque sí he bajado dosis de olanzapina (de 5 mg a 2.5) con supervisión psiquiátrica también he notado claramente cómo estas pastillas me ayudan a mantenerme estable. En este artículo te comparto cómo la práctica de la meditación me ha traído de vuelta a casa como método complementario a los fármacos. Te comparto los 6 beneficios principales que he encontrado en la práctica regular de meditación mindfulness como paciente de Trastorno Bipolar:

1.- No creerte todo lo que piensas. Las personas que tenemos Trastorno Bipolar sufrimos porque muy frecuentemente nos creemos todo lo que pasa por nuestra mente, creemos que todo lo que pensamos es verdad y no necesariamente es así. La meditación es el arte de observar los pensamientos sin juzgarlos ni etiquetarlos. Entre más practicas más fácil es dejar que tus pensamientos fluyan sin apegarte a ellos. No se trata de tener la mente en blanco, se trata de fluir con ella.

Tu mente es como si fuera un río, todo el tiempo está fluyendo. Si tú te metes al río y te agarras de una rama te estarás resistiendo al flujo del río. Si te sueltas y te agarras de una piedra, te estarás resistiendo de nuevo. Si en vez de aferrarte a algo te dejas ir, te sueltas y permites que el río te lleve a donde te tenga que llevar te sentirás más ligero, te sentirás libre. Esto no sucede de la noche a la mañana, se practica todos los días pero la sensación de ligereza hace que el proceso valga la pena.

2.- Aprender a estar realmente presente. Hay una frase muy famosa de Edward Hallowell que dice: “El TDAH es como tener un motor de Ferrari para un cerebro con frenos de bicicleta. Fortalece los frenos y serás un campeón“. El Trastorno Bipolar es una versión intensificada del TDAH, las personas con Trastorno Bipolar somos sumamente dispersas, es muy sencillo perdernos en pensamientos de futuro y pasado y aprender a vivir en el momento presente es algo crucial para nuestras vidas. Meditar consiste en fortalecer los frenos.

Cuando realmente practicas todos los días el estar presente mientras haces tus actividades empezarás a disfrutar cada vez más el sabor, la textura y el aroma de tus comidas, empezarás a notar más el lenguaje corporal de las personas con las que interactúas y las escucharás realmente, serás mucho más productivo y eficiente en tu trabajo, si sales al parque podrás escuchar el canto de los pajaritos, sentirás el sol y el viento rozando tu piel, te darás cuenta de que la vida sucede en el momento presente todo el tiempo.

3.- Desarrollar inteligencia emocional. La meditación te brinda la maravillosa oportunidad de observar tus emociones. Aprender a observar, identificar, aceptar y sentir tus emociones te lleva sin lugar a dudas a sentirte en paz contigo mismo. La idea no es eliminar ni suprimir tus emociones, más bien hacerte amigo de ellas. Los días en que más miedo y ansiedad he tenido ha sido porque en vez de afrontar mis emociones he decidido evitarlas. Negar la ansiedad es el camino para generar aún más ansiedad. Negar la ira genera aún más ira. Afrontar amorosamente todas y cada una de tus emociones te libera, te relaja justo en medio de la emoción y eso hace que pierdan intensidad.

Todos los seres humanos tenemos una mochila invisible que cargamos en la espalda que se llama “la mochila de las emociones reprimidas“. Las personas con Trastorno Bipolar tenemos estas mochilas tan llenas que nuestras manías y depresiones simplemente muestran lo pesados que andamos. Practicar meditación mindfulness además de entrenarte para hacerte más hábil gestionando tus emociones te da herramientas para que dejes de meter (reprimir) nuevas emociones a la mochila y para que saques (liberes) viejas emociones y las puedas dejar ir. Imagina cómo te sentirías con una mochila vacía o muy ligera. Si yo estoy pudiendo vaciarla tú también puedes hacerlo.

4.- Desarrollar ecuanimidad. La manía no puede existir sin la depresión, y la depresión sin la manía. Son dos caras de la misma moneda. Al igual que la alegría y la tristeza, son polos opuestos. No puedes renunciar a la depresión y decirle sí a la manía, ni al revés. Si le haces mucho caso a las emociones positivas y tratas de evitar las emociones negativas no vas a llegar a ningún lado, no saldrás de tu reactividad y seguirás enredado en tus emociones.

La meditación te brinda la oportunidad de observar cómo te emocionas con lo “bueno” y te pones triste con lo “malo”. Entre más lo observes menos intenso se hará en ambos polos. Poco a poco, lentamente, verás cómo esa vocecita que se pone feliz y luego se pone triste se hace más y más chiquita. Esto no significa que vas a dejar de vivir experiencias, significa que vas a aprender a vivir más plenamente, con todo tu potencial. Aprenderás a usar la energía que utilizas para decir mentalmente “qué belleza” en capacidad de atención para realmente experimentar la belleza. Imagina poder vivir todo lo que vives con una sensación de ligereza, sin tanto apego, permitiendo que las cosas sean como son. Ecuanimidad consiste en tener un estado de ánimo constante, sin tantas subidas ni bajadas y esto te lo regala la meditación.

5.- Encontrar amor propio. Una práctica meditativa que no te hace más amoroso, está incompleta. La meditación siempre te va a llevar al amor propio. ¿Cómo vas a amar a los demás si ni siquiera te amas a ti mismo? Una persona con Trastorno Bipolar no se ama lo suficiente, si se amara de verdad la enfermedad no existiría, no tendría sentido. La depresión consiste en victimizarte por lo que no tienes y la manía consiste en desear algo que crees que no tienes. La realidad es que ya tienes todo aquello que buscas, está dentro de ti y la meditación te hace consciente de ello.

Entre más practiques meditación más estarás en sintonía con las sensaciones de tu cuerpo, con tu corazón, con tu mente, con tus emociones, con el silencio y esto te dará la oportunidad de cambiar tu relación con estas experiencias. ¿Hacerme amigo de mi cuerpo? ¿dejar de auto juzgarme o criticarme? ¿permitir todas mis emociones? ¿respetar y escuchar mis impulsos? ¿aceptarme totalmente tal y como soy? ¿aceptar todos mis defectos? ¿quererme realmente?

Después de un tiempo de práctica es inevitable empezar a escuchar a tu corazón que te pide a gritos que te mimes, que te des atención. ¿Cuándo fue la última vez que leíste un libro emocionante? ¿y que fuiste a un restaurante solo a cenar un exquisito platillo? ¿y que diste un paseo por un bellísimo parque? No importa lo que los demás piensen de ti, tu práctica meditativa te guiará para que empieces a atender a ese niño que tienes dentro. Te vas a sentir muy feliz con el tiempo.

6.- Encontrar tu propósito de vida. Después de un tiempo de práctica regular de mindfulness, haciéndote hábil escuchando a tu intuición empezarás a tomar decisiones de acuerdo a lo que sientes relacionadas con tus actividades cotidianas. Es posible que algún día quieras cambiar de trabajo, crear una empresa, irte a otro país, comenzar un hobbie nuevo, desempolvar tus habilidades artísticas que reprimiste por años o algo que esté en congruencia con tu propósito de vida.

Todos estamos aquí por una razón, con un propósito. El problema de este mundo es que los médicos quieren ser artistas, los abogados quieren ser escritores y los contadores quieren ser científicos. Realizar tu misión de vida es lo más gratificante y liberador que te pueda suceder porque siempre te llena de entusiasmo (equilibrado), de gozo. No importa si no sabes claramente cuál es tu misión, estar haciendo algo que realmente te apasiona basta para sentirte feliz. Si ya estás trabajando en tu propósito de vida la meditación te ayudará a encontrar más profundidad en tus actividades, podrás ver las cosas desde otra perspectiva y serás mucho más creativo.

Mi misión es enseñar meditación mindfulness, justo cuando renuncié a mi empleo anterior y me puse a trabajar de tiempo completo en impartir mis cursos y retiros fue cuando pude bajar mi dosis de olanzapina a la mitad. Mi creatividad, que estaba bloqueada por el medicamento, se puso a mi disposición y la pude utilizar con mucha libertad para hacer lo que vine a hacer.

Estos fueron los 6 beneficios que he experimentado como paciente de Trastorno Bipolar después de practicar meditación mindfulness durante 4 años consecutivos. Las palabras pueden ser muy bonitas e inspiradoras pero lo más importante si quieres encontrar paz es que tomes manos a la obra, hay que hacer que las cosas sucedan. Te invito a que te comprometas con tu proceso de sanación interior.

Si te interesa aprender mindfulness en línea te invito a que tomes nuestro curso de 6 semanas Aprende a meditar desde cero (en línea) desde la comodidad de tu casa u oficina. Yo personalmente te daré todas las herramientas que necesitas para iniciar y mantener una práctica regular de meditación mindfulness. Te resolveré todas tus dudas y contarás con mi asesoría directa para que logres hacer el hábito de practicar diario. No dejes pasar más tiempo, checa toda la información aquí, inscríbete y encuentra el bienestar que siempre has anhelado.

¡Te mando un fuerte abrazo donde quiera que estés!

PD: Aclarando el título, sería técnicamente incorrecto decir que me he “curado” del Trastorno Bipolar, porque si dejo los medicamentos lo más probable es que en unos pocos días empiece a sentir ciertos desequilibrios mentales (ya los he experimentado). Sin embargo, algo que puedo afirmar con toda certeza es que, gracias al mindfulness y a los medicamentos, estoy viviendo una vida plena en la que me siento totalmente libre, feliz y lleno de paz.

Acerca del autor

David es el fundador y director de Libera Mindfulness. Está certificado como facilitador por el Instituto Mexicano de Mindfulness. Se recuperó del Síndrome de Tourette y de Trastorno Bipolar: es lo que más lo motiva a enseñar. Se dedica de tiempo completo a impartir cursos, talleres y retiros de mindfulness.

9 comentarios sobre “¿Cómo se cura el Trastorno Bipolar? Mi experiencia con la meditación mindfulness

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  3. Mauricio Márquez Castillo Responder

    Hola David me gustaría también certificarme en mindfulness.. yo soy psicólogo y siempre he sentido curiosidad por el mismo empecé a meditar muchos años atrás pero no tengo tanta disciplina para hacerlo.. por el trastorno bipolar tipo 1 cada día descubro cosas nuevas sobre como funciona la mente uno de mis sueños ha sido crear un grupo de psicoterapia para el trastorno pero nunca he luchado por ello

    • David Marinzapién González Autor de la entradaResponder

      Hola Mauricio. Tú puedes 🙂 Puedes utilizar aplicaciones de coaching (en su momento yo utilicé “coach.me”) o puedes tomar uno de nuestros cursos en línea para darte el empujón que necesitas.

      Entiendo que como psicólogo quieras ayudar a mucha gente, te recomiendo que priorices tu propia salud mental-emocional por encima de la de los demás. No podemos darle oxígeno a otras personas si no nos ponemos primero la mascarilla nosotros mismos.

      ¡Un abrazote! 😀

  4. Leidy Responder

    Gracias por este articulo David. Excelente de verdad, admirable todo lo que haces!
    Soy de Colombia, tengo 29 años y vivo con trastorno bipolar desde hace ya 5 años, en mi experiencia también he sido testigo de como poco a poco la meditación y hacer yoga me ayuda demasiado a regular mis crisis. Leer tu articulo me motiva aun mas a ser disciplinada y no desfallecer en mi practica diaria, espero lograr ese estado de eutimia constante donde siento que puedo ser completamente yo.

    • David Marinzapién González Autor de la entradaResponder

      Excelente Leidy, gracias por compartir. Me da muchísimo gusto que estés practicando yoga y meditación. No lo dejes. Conforme pase el tiempo notarás que llegarán más y más nuevos beneficios que te gratificarán profundamente y fortalecerán tu compromiso con la práctica. Te mando un abrazote 🙂

  5. María jose Responder

    Quisiera que me animaras verás de mis 57 años he pasado 30 en eutimia con medicación pero recai en mayo con ansiedad y depresión ssabia del mindfulness y hace solo 1 semana que hago online de la universidad de zaragoza pienso ser constamte pero me ayudara lo intuyo

    • David Marinzapién González Autor de la entradaResponder

      Gracias por compartir María José, definitivamente el mindfulness te beneficiará muchísimo. Pase lo que pase practica 30 minutos diarios y observa tus estados de ánimo sin juzgarte ni quererte cambiar. Conecta con ellos, entrégate a ellos. Déjate fluir como si estuvieras en un río y naturalmente verás como poco a poco cambian y sales de ellos. Esto que estás viviendo es tu oportunidad para volverte más consciente, para salir de la reactividad y encontrar paz. La paz siempre está aquí y ahora disponible, presta máxima atención en todo momento del día para que la reconozcas y puedas descansar de tanta emoción. Te mando un abrazote 🙂

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